Susto en el Cementerio La Mujer con Cadenas

Saludos estimados amigos, hoy continuamos con los relatos de espantos y lo paranormal en El Salvador, hoy traemos el relato de un encuentro con un espanto en forma de mujer, ese el cual lleva cadenas alrededor de esta y va envuelta en un manto de color morado, así es amigos, conozcamos esta curiosa historia de la voz de la persona que logro verla y nos transmitió el relato; conozcamos esta extraña y aterradora experiencia. Veamos entonces a la mujer con cadenas, un susto de El Salvador, amigos, pero ademas después de leer esta historia, puedes leer también la leyenda del padre sin cabeza aquí.

El Extraño encuentro con la Mujer Amarrada con Cadenas

Doña Maria, es el nombre que usaremos para referirnos a la persona que nos narro su aterradora experiencia, perdió a uno de sus hijos en un accidente de transito allá por los años 80s, paso la vela y todos los cortejos fúnebres y ella con el dolor de cualquier madre, no aceptaba la irreparable perdida de su hijo, se dice que los hijos deben enterrar a los padres y no los padres a estos...así pues se procedió al entierro de su hijo en uno de los tantos cementerios municipales y descuidados de El Salvador; al terminar el entierro la madre no deseaba marcharse de la tumba de su hijo y sus demás familiares al fin logran llevársela del lugar pero sin que ella se sintiese conforme.

Doña Maria no estaba conforme y mucho menos aceptaba la perdida de su amado hijo, así que desde la muerte de este, ella salia muy temprano a la tumba de su hijo y se marchaba de esta ya entrada la noche, como esperando un milagro y ver a su hijo salir de allí, su estado emocional decaía y conversaba con aquella tumba, sus otros hijos iban por ella negándose a volver si no hasta bien entrada la noche; así paso el tiempo viendo entierros y conviviendo con la tumba de su hijo durante muchos días. Algo cambiaría de repente un día

La desconsolada madre pasaría una experiencia que le haría entender que su hijo no volvería mas y solo visitaba una tumba, los cementerios en El Salvador y hablamos de los municipales, no son planificados, mas bien son predios baldíos y de terrenos irregulares con colinas y barrancas, paredones y viejos arboles, con senderos y mucha maleza, ademas sin un sentido de ubicación en cuanto a los sepelios; mas aun con tumbas olvidadas y que hacen sentir el ambiente de terror. Todo lo descrito anteriormente, sumaba a lo que la Doña Maria estaba por vivir.

Eran ya pasadas las cuatro de la tarde un día y los sepultureros estaban por retirarse y cerrar el portón del cementerio, pero estos muy amablemente siempre dejaban un pequeña e improvisada puerta en el cerco del cementerio, siempre lo hacían para que ella saliese, la madre agradeció el gesto y les dijo ese día que cenaría con su hijo, estos hombres ya estaban acostumbrados a esta diaria escena de aquella madre, así eran los días de aquella pobre señora que no aceptaba la ausencia de su hijo, pero le advirtieron que de repente se veían y escuchaban cosas en ese lugar; siempre se lo decían. Esa vez ya cuando el sol ocultaba sus rayos pero había suficiente luz, paso algo muy aterrador y que cambio la forma de pensar de aquella madre...escucho un tremendo y desgarrador alarido y los perros de inmediato aullaban, las aves salieron volando en pánico y se escucho un tropel, alguien corría y gritaba con dolorosa voz.

Ella apenas podía ponerse en pie por aquel susto, pero vendría lo peor... por todo el sendero venia corriendo una mujer, esta venia envuelta desde la cabeza hasta las rodillas en un manto morado y enredada con unas gruesas cadenas! Aun así corría a gran velocidad como si el diablo la siguiese por todo el sendero...llega hasta donde estaba la desdichada madre y estaba paralizada, la mujer se carcajea de una manera infernal, para luego continuar con su grito por todo el cementerio! La señora pierde el cocimiento y pasa toda la noche en el cementerio, sus familiares llegaron a buscarla tarde ya que se había pasado del horario habitual de retornar a casa.

Así paso varios días con fiebre y sin poder sostener el habla, con el pasar del tiempo se recupero de a poco y recobro el habla para poder relatar su experiencia, después de eso la señora dejo de ir a diario a ver la tumba de su hijo, cuenta que hoy lo hace de manera normal y acompañada de sus familiares, cada día que cumple años de muerto y cada 2 de noviembre que se celebra el día de los difuntos. Increíble verdad?

Que les pareció el relato de esta madre amigos? Espeluznante, pues solo te pido por favor que si te ha gustado lo compartas y así mas gente conoce estas tenebrosas historias amigos, no me queda mas que despedirme de ustedes y desearles lo mejor, nos leemos en un próximo post.