La Leyenda de Las Cataratas del Iguazú

¡Saludos amigos y bienvenidos a una bonita leyenda internacional! Claro que si y hoy vamos a leer sobre las cataratas del Iguazú, esas preciosas cascadas compartidas entre Brasil y Argentina y ubicadas sobre el río Iguazú; pues bueno, amigos estas cataratas que también son una de las siete maravillas del mundo, poseen una fantástica y bonita leyenda de origen Guaraní. Leamos entonces esta leyenda, amigos.

Leyenda de las Cataratas del Iguazú

En el caudaloso río Iguazú, amigos, ese rio en medio de la selva sudamericana y que su nombre en lengua Guaraní significa "Agua Grande". Pues mucho antes de la conquista de América por parte de la invasión española, el rió lo habitaba y dominaba una gigantesca, mágica y malvada serpiente que respondía al nombre de Boi; era tan malvada y monstruosa que le exigía al pueblo guaraní sacrificios humanos, pues esta se creía la deidad del rió y de toda la selva. La ofrenda consistía en el sacrificio de la doncella más bella de las tribus, la cual debían lanzar al rió para honrar a Boi.



Si los guaranís no cumplían con los sacrificios, Boi lanzaría maldiciones sobre estos y descargaría su ira sobre el pueblo guaraní, las ceremonias tomaban tal relevancia que todas las tribus guaranís debían asistir y estar presentes en estas, aun así aquellas que vivían a muchas noches de distancia; de entre todas esas tribus invitadas estimados amigos, asistió un joven y gallardo cacique de nombre Tarobá, Este cacique cumpliría un papel muy importante en esta leyenda, amigos.


Les recuerdo que según esta bonita leyenda, sobre el rió Iguazú no existían aún las cataratas del Iguazú, así que aclarado esto, pues continuamos con el relato. Tarobá como cacique participaba con los demás caciques de las antesalas a la ceremonia y fue ahí donde vio por primera vez a la bella doncella que sería entregada a Boi; Tarobá se enamoró de la doncella de inmediato, el nombre de ella era Naipi. Tarobá se enamoró de la doncella india y no concebía la idea de que la sacrificaran y planeo rescatar a la joven Naipi y llevarla con el.

Tarobá se reveló ante el concejo de ancianos y caciques guaraní y trato de convencerlos de que evitaran sacrificar a Naipi, pero todos sus argumentos para convencer al concejo fueron en vano, pues estos temían las consecuencias de la serpiente Boi, Tarobá estaba desesperado y no encontraba la manera de salvar a la doncella sin causar problemas a los guaranís; pero pudo más el amor y la noche antes de la ceremonia del sacrificio de Naipi, Tarobá decidió raptarla y llevársela en su canoa a través del rió Iguazú. Tarobá lo intenta y empieza su fuga junto a Naipi, pero estaba por ocurrirles lo peor de sus vidas.



¡Para su mala suerte, la malvada serpiente Boi todo lo podía ver y se dio cuenta de la fuga de los jóvenes amantes y que Tarobá se llevaba su preciada ofrenda, podía asesinarlos de un golpe o devorarlos de un tajo, pero descargo primero su furia para después lanzarles una maldición; Boi dio un tremendo golpe de cola sobre el rió, luego encorvo su gigantesco cuerpo y partió el cauce del rió Iguazú formando de esta forma lo que hoy conocemos como las cataratas del Iguazú! De esta forma atrapo a Tarobá y Naipi a los cuales castigaría por la eternidad.

¡Primero tomo a Tarobá y lo transformo en un árbol el cual se logra ver en la parte superior de la cascada, ahí en la caída de la garganta del diablo! ¡A Naipi la convirtió en una roca de la cual su cabello forma una de las caídas de agua de las cataratas; y de esta manera están condenados a verse y no tocarse jamás! Después de hacer esto, la malvada serpiente Boi se sumergió dentro de la garganta del diablo, que es la caída de agua principal de las cataratas, y desde ahí vigila el castigo de aquellos jóvenes que nunca volverán a reunirse.

Pero amigos resulta que en esos días en que se forma el precioso arco iris en las cataratas del Iguazú, en esos días soleados el arco iris supera el poder de Boi y junta a Tarobá con Naipi, así de esta forma mágica los enamorados pueden jurarse amor, pues el arco iris va desde Tarobá a Naipi y viceversa... ¿Fantástica leyenda, verdad, amigos? Pues espero que te haya gustado y la compartas para que mucha más gente la conozca. Era una época en que los nativos trataban de explicar la formación de esas grandes maravillas naturales y como es normal, lo hacían de una manera maravillosa y mitológica. Pero no te vayas antes sin leer la leyenda del gallo y los ocho soles aquí.

Por hoy me despido de ustedes amigos y siempre invitándoles a leer mis publicaciones, hay muchas leyendas y curiosidades de El Salvador y el mundo, amigos y se las iré mostrando en este blog; así pues, los espero en una próxima publicación.