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jueves, 4 de abril de 2019

Atonal El Príncipe Guerrero de Cuscatlán







El Príncipe Guerrero Atonal o el Sol de Agua 

Bienvenidos como siempre estimados amigos lectores a su blog favorito de leyendas de El Salvador y el mundo, hoy vamos a conocer una leyenda sobre los héroes de Cuscatlán, en este caso vamos a conocer al príncipe Atonal o ¡El Sol de Agua! Conoceremos como supuestamente enfrento a las hordas españolas durante la conquista de América, y ya sabrás el porqué decimos supuestamente. Vamos a ello y conozcamos juntos la leyenda, amigos.

Atonal o El Sol de Agua

Las leyendas e historias sobre la conquista de América son muchos amigos, también los héroes que en cada región enfrentaron a los invasores españoles, por supuesto peleando a muerte por su legítimo derecho a vivir y evitar la esclavitud, así como el saqueo de sus pueblos; en nuestro caso uno de esos grandes héroes fue él ¡Príncipe Atonal! Su nombre significa: ¡Sol de Agua! El señorío de Cuscatlán estaba compuesto por varios territorios y Atonal regía en la zona de Izalco. Atonal fue el encargado de dirigir la misión de combatir al ejército invasor español y sus indios aliados rebeldes, esos que sumaban hombres a sus hordas invasoras españolas y volvieron tremenda la lucha; esa que le esperaba a nuestro gran héroe de Cuscatlán.



El cacicazgo de Izalco le debía obediencia al Señorío de Cuscatlán, pues este era parte de su territorio; entonces ahí, reunidos en concejo en el año de 1524 todos los príncipes del Señorío de Cuscatlán, debatían por la amenaza que se aproximaba, es Atonal quien hace uso del derecho a hablar y toma la palabra exclamando orgulloso: "Mi vida por nuestra gente, oh gran señor", los demás príncipes escucharon atentamente lo que había dicho Atonal y asientan con su cabeza dando su aprobación... pero su gran señor es ni más ni menos que Atlacatl, ese el cual se entusiasma y siente una gran satisfacción por las palabras del joven príncipe guerrero Atonal.


Las palabras y compromiso de Atonal, así como la de todos los presentes en el concejo, despertaron un espíritu de lucha por la libertad y protección de los territorios del Señorío de Cuscatlán, así como los pueblos de todo Cuscatlán ante un enemigo desconocido, uno que a la fuerza desea arrebatarles todo amigos; si... el saqueo de Cuscatlán. La unión y solidaridad se apoderó de los pueblos de Cuscatlán de una manera jamás vista en nuestro territorio y los héroes de este.

Durante el concejo Atonal les plantea su estrategia para combatir a los invasores, en esta se escoge la forma y el lugar donde se enfrentarían a las fuerzas invasoras de España y el mal recordado Pedro de Alvarado, entonces se decide que los enfrentaran en un lugar llamado Acaxual, en donde Atonal apostaría ¡3000 guerreros pipiles! ¡Llevando consigo otros 3000 hacia Tacuzcalco! Si amigos ese punto en donde hace poco se dio un incidente en el país actualmente, uno porque se está construyendo una residencial sobre este sitio histórico del país. Bueno... en fin Tacuzcalco fue el punto escogido para librar la última batalla contra los invasores españoles y sus aliados, si es que estos lograban pasar las líneas apostadas en Acaxual... diseñada la estrategia amigos, es el mismo príncipe guerrero Atonal quien espera la llegada de los invasores para darles pelea.



Sé que esta demás decirlo amigos, pero nuestros ancestros eran unos maestros rastreadores y, así pues, se colocaron varios de ellos como espías y por órdenes por supuesto del príncipe Atonal, por todo el territorio, de esta manera se colocaron en los senderos y veredas en la zona costera del rió Paz, hasta donde hoy se conoce como Caluco en Sonsonate; se había colocado un parapeto entre las regiones de Mochicalco y Acatepeque y además se instaló un Calpilli (nombre que se le daba a una pequeña unidad de combate en esa época) que era una docena de guerreros de origen Pipil. De los mejores guerreros del Señorío de Cuscatlán.

La Batalla de Acajutla

Cuando Hernán Cortés consumo el dominio sobre la ciudad de Tenochtitlan, delego la conquista al sur de los territorios de esta ciudad al que sería el enemigo del príncipe Atonal, ese fue ni más ni menos que el malvado conquistador Pedro de Alvarado; este partió hacia el sur un diciembre de 1523 con 300 soldados españoles y 5000 indios rebeldes sumados a las tropas de Pedro de Alvarado. En la hermana república de Guatemala conquisto al pueblo Quiché, esto favoreció a Alvarado, pues los conquisto con la ayuda de otro pueblo rival, los Kakchiqueles; estos se sumaron a las fuerzas españolas e invadieron el territorio de Cuscatlán en contra del pueblo Pipil. Esta seria llamada la batalla de Acajutla.



Pedro de Alvarado llego un 8 de junio a tierras de Acaxual, como un zorro listo o quien sabe si con suerte o más bien temor, paso de largo por el valle donde les esperaba el ejército de Atonal y la primera línea de fuerza, Pedro de Alvarado se topa con una zona pantanosa y se ve obligado a desviarse mucho más al sur de su destino; Pedro de Alvarado no puede evitar la confrontación y cuando se desvía más al sur se encuentra con los guerreros pipiles que rodean aquella expedición española. No le queda más que aceptar la situación y ordena atacar al grito de ¡Viva España, fuego con todo y terminen con los indios! Así gritaba el invasor y empezó la batalla entre los españoles y sus aliados en contra del orgulloso pueblo Pipil.

El príncipe Atonal pelea en esa cruda batalla, era un guerrero fuerte y en una mano portaba una lanza y derribaba a cuanto enemigo se cruzaba en su camino y se atrevía a desafiarle, en la otra mano portaba un maso hecho de madera de Maquilishuat, con sendos golpes dejaba enemigos tirados por el campo de batalla; por el otro lado Pedro de Alvarado monta un magnífico corcel y peleando se abre paso entre sus enemigos. Atonal lo distingue y prepara su lanza levantando su brazo derecho, fija su objetivo y ¡Lanza contra su enemigo! Aquella lanza pasa entre los enemigos y con enorme fuerza se clava en la pierna de Alvarado, es tanta la fuerza con que viajaba aquella lanza que atraviesa la pierna y hiere de muerte al caballo de Alvarado cayendo de golpe junto al invasor.

Los libros de historia dicen que fue una flecha la que atravesó la pierna de Pedro de Alvarado y le dejo cojo para toda la vida, la leyenda dice que fue una lanza arrojada por el príncipe Atonal, en fin la batalla pasa factura a los pipiles quienes huyen hacia Tacuzcalco para reagruparse con los otros guerreros apostados ahí, las armas más modernas, el hierro y los indios aliados los hicieron retroceder, Atonal da la orden de prepararse para luchar a muerte, pues los invasores están por llegar; por el otro lado los españoles deben acampar, pues hay que atender a Alvarado que está gravemente herido. En Tacuzcalco los están esperando 5000 guerreros pipiles listos para dar batalla.

Cinco días acamparon los invasores y sus aliados mientras atendían a Pedro de Alvarado, después de eso siguieron su camino hacia Tacuzcalco en donde les esperaba el príncipe guerrero Atonal y sus valientes pipiles, les esperaba una batalla más cruda que la vivida en Acaxual...no había marcha atrás amigos, pues debían enfrentarse a los 5000 guerreros pipiles en Tacuzcalco; la diferencia entre las tropas invasoras y nuestros héroes amigos fueron las armas y equipo. Esa fue su ventaja sumada a los indios rebeldes Tlaxcaltecas y los Kakchiqueles, esto era una fuerza aliada en contra del Señorío de Cuscatlán; la batalla fue dura y sangrienta, amigos. Ya en la batalla Atonal ve la destrucción de su pueblo y como diezmaba su ejército, este decide huir hacia las montañas con los sobrevivientes y Pedro observa su fuga dando la orden a gritos a sus hermanos Jorge y Gonzalo, que le persigan y maten, pues es el responsable de su cojera incurable para toda la vida.

Atonal y los sobrevivientes se esconden tras unas grandes rocas, su ejército ha sido derrotado por el invasor enemigo, estando ahí recuerda sus bravas y valientes palabras en el concejo..."mi vida por nuestra gente, oh gran señor"... entonces toma fuerza y venderá cara su derrota, decide salir de su escondite dando un feroz grito de guerra y se lanza sobre Jorge de Alvarado con su maso, pero Gonzalo de Alvarado que estaba en mejor posición le ve y dispara con su mosquete... matando al príncipe Atonal.



Después de la batalla y el martirio, el cuerpo de Atonal o el Sol de Agua es llevado por su pueblo y hermanos hasta Caluco, ahí el alma de Atonal es levantada por águilas que aparecieron en el horizonte, se llevan su alma y la depositan en el cielo de los dioses junto a Quetzalcoatl en donde su alma vivirá eternamente; Atonal cumplió su promesa, amigos.

Esta es la leyenda del poderoso príncipe guerrero Atonal y su lucha contra los invasores y conquistadores españoles. Espero amigos que les haya gustado esta leyenda y como siempre te pido por favor compártelas para que más personas conozcan de nuestras leyendas y tradiciones, les espero en un próximo artículo; no sin antes decirles que según el manto de Tlaxcala Atonal no ¡Existió! Por lo cual les dije empezando el artículo que supuestamente Atonal enfrento a los españoles; pero puedes leer sobre eso aquí.

Fuente: Wikipedia, libros de historia de El Salvador, faes.gob.sv, tihuilo.wordpress.com

1 comentario:

  1. Yo me apellido Atonal y si los tlaxcaltecas pelearon contra Atonal como es que hay tanto Atonal en Tlaxcala!?

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